La desvalorización del planeta, el afán de colonizar Marte, la minimización de la naturaleza, responden a una estructura mental de descrédito que alienta y aplaude la sobreexplotación, la dilapidación de los recursos, la cacería y extracción indiscriminadas.
La cultura que dice: -"El amor por la Madre Tierra es paganismo; la Tierra es un lugar de paso y de castigo; el cielo es el objetivo", está considerando a este planeta como un lugar 'inferior'; el "reino de Satanás". El dogma que aplican es un lamentable invento, pero ni siquiera la Ciencia, con la que pretendieron superarlo, es objetiva.
La actividad científica toma una de las ideas del sustrato cultural preconcebido e intenta demostrarla con observaciones medidas.
La filosofía plantea preguntas que son inquietudes comunes a todos los humanos, pero cada cultura le da su propia respuesta.
La cultura que nos impusieron por medio de la educación formal obligatoria asegura que todo está conformado por fenómenos físico-químicos en un proceso de complejización creciente.
¿Y el intelecto? ¿y los sentimientos? ¿y el espíritu?
Todas las culturas que integran la Filosofía Prediluvial consideran que no podríamos pensar si el Universo no pensara, y no podríamos amar si el Universo no se apasionara, y no tendríamos espíritu si todo lo que existe no fuera sino un Gran Espíritu Trascendente. Las "leyes", que es preciso observar, no las inventamos los humanos en el proceso de lucha de clases; las Leyes son, y si no son observadas se sufren las consecuencias.
En el presente hay un gran movimiento ecologista que involucra a miles de millones de personas, a favor de considerar a la Tierra como nuestra única casa-hogar. Y son las concepciones indígenas las que nos están enseñando a redirigir nuestras ideas y a reaccionar ante los mandatos de la cultura asesina a mansalva.
El pensamiento depredador y desvalorizador dice que el Universo es un montón de escombros dispuestos por la ley de la gravitación universal; por lo tanto, el planeta también.
La filosofía antigua dice que el corazón de la Tierra es un diamante. Y la buena noticia es que en el presente hay científicos que están intentando demostrarlo, con lo que la Estructura Oficial de las Ideas puede llegar a hacer un giro en favor de los que admiran, respetan y temen a la naturaleza.
"El corazón de la Tierra es un diamante". Marta Balbi. 31-05-2008.
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